Las mujeres de El Tajamar rescatan la cultura colonial mediante el emprendimiento

Este jueves será la Feria en el parque Central (09:00)

Tulcán. Una botella texturada tipo fachada generó gran expectativa en las vecinas del barrio El Tajamar, en donde la creatividad y la paciencia son la clave para moldear sus figuras.  

La habilidad de sus mujeres se aprecia a simple vista pese a que es una técnica nueva en el Cantón. Esa fue la explicación de Ruth Cabrera, quien felicitó a las participantes por el interés que pusieron en cada jornada. Agregó que las botellas, gracias a esta dinámica, tendrán un nuevo proceso convirtiéndose en adornos para el decorado… “ahora serán fachadas de casas coloniales”.

 Escultura. Además, este taller municipal intenta revivir la historia infraestructural de nuestro país con la escultura de casas coloniales, época en la que la riqueza arquitectónica fue singular. De ahí que las mujeres conjugan con este arte, técnicas de reciclaje, pintura, forma, historia, cultura, entretenimiento...

El beneficio no termina allí. En adelante, las capacitadas podrán replicar su aprendizaje en madera y teja; para el efecto se utilizarán los mismos materiales, textura, diluyente, porcelanicrón, pintura... Ese fue el aprendizaje que recibieron en el centro de capacitación del barrio, en donde se convocaron 34 damas que refinan su arte decorativo.

Emprendimiento. Yolanda Viveros, vecina del barrio y participante de este taller de emprendimiento, destacó la importancia de esta actividad que la capacita para desarrollar su microempresa. En efecto, actualmente tiene previsto crear en sociedad un taller que dinamice su economía.

“Al inicio, esta manualidad se hizo difícil por su condición de nueva, pero con la práctica empezamos a dominarla”, dijo Patricia Taticuán, quien fabrica dos botellas texturadas que serán puestas a la venta.

Así, miles de mujeres tulcaneñas optan por esta instrucción que resulta atractiva para la mente además de ser un entretenimiento e incentivo económico, pues su resultado genera recursos pata un sinnúmero de familias afectadas por la crisis que azota al país, sobre todo al cordón fronterizo.